Al irrumpir la COVID-19 y cambiar las reglas por las que se regían las empresas y la sociedad, los responsables de la gestión empresarial han tenido que agilizar los trámites y acelerar la digitalización de su fuerza de trabajo, de sus procesos y de sus operaciones. Pero liderar equipos en remoto era tan común hace pocos meses.
La situación provocada por la pandemia nos ha permitido confirmar la necesidad de tener flexibilidad en el puesto de trabajo. Dejar las rigideces y formalidades para mejorar la conciliación y facilitar una forma de desarrollar la actividad profesional del empleado mejor integrada con su esfera privada y con su día a día.
La “nueva normalidad” nos brinda la oportunidad de vivir cambios, introducir mejoras y mantener las buenas prácticas implementadas durante los meses de confinamiento. El mundo empresarial ha de adaptarse a partir de ahora a una organización del trabajo más flexible y, entre otras cosas, a la necesidad de liderar equipos desde la distancia.
Los expertos en productividad dirán que la mejor manera de garantizar que un participante remoto se involucre por completo durante una reunión es enlazarse mediante una videoconferencia. De lo contrario, los empleados simplemente atenderán la llamada mientras realizan otras actividades.
El correo electrónico es sin duda la más popular, pero algunos consideran que es el modo menos eficiente de comunicase. Existen algunas herramientas que permiten mejorar la comunicación y mantener reuniones con los empleados:
Si, como en la mayoría de las oficinas, divides el trabajo por equipos, asegúrate de que la comunicación entre ellos fluya de manera efectiva. Mantente atento a los objetivos globales del equipo y estudia si lo que está haciendo cada miembro contribuye a este fin. Podrías encontrar que algunos miembros trabajan en aspectos del proyecto que no se relacionan con la estrategia general o, peor aún, que trabajan en las mismas tareas de diferentes maneras.
La principal tentación que surge con el modelo de trabajo a distancia o con equipos distribuidos es aprovechar la distancia y desconectarse del trabajo. Por eso es crucial establecer metas y expectativas para cada empleado, y asegurarse de que se cumplan a cabalidad. Trata de encontrar un equilibrio entre ser un jefe controlador y limitarte a comunicar tus expectativas: mantente atento a tu equipo, pero no los satures.
Aplica todos estos consejos y empieza a establecer dinámicas que sean favorables para todos. Aunque tu figura sea la de líder, eres el que más tiene que ayudar y apoyar a los demás si quieres tener un equipo cohesionado, válido y satisfecho con su trabajo.
Con el programa de Máster en Dirección de Recursos Humanos y Transformación Digital de las Organizaciones, EUDE busca preparar a los actuales y futuros profesionales para que sean capaces de dirigir eficiente y eficazmente un área de RRHH, además de liderar de forma competitiva equipos y personas mediante el Fortalecimiento, ampliación o actualización de conocimientos y el desarrollo de aquellas competencias que permitan afrontar con éxito el desarrollo de sus actividades profesionales.
Con el avance de la globalización, el comercio internacional es una actividad que ya no está destinada a unas pocas empresas, sino que involucra a muchas de ellas. Además, este año ha demostrado la importancia del comercio exterior, la logística y la planificación dentro de los mercados internacionales. En este contexto, los profesionales del sector deben asegurarse de obtener los conocimientos apropiados para destacar. Existen, por ello, muchos motivos por los que estudiar un Máster en Comercio Internacional.
Esta formación te capacita como especialista para diseñar un plan estratégico Internacional y para hacer frente a todos los retos que se presentan en el proceso de internacionalización de una empresa, potenciando tu currículum vitae y aumentando exponencialmente tus posibilidades de inserción y mejora laboral. El índice de inserción laboral que ofrecen estos programas es elevado, hasta el 93% de los titulados según los casos, y presenta unas expectativas salariales que rondan los 82.000 euros brutos anuales.
El Máster en Comercio Internacional y Dirección Estratégica pretende aportar al alumno una visión eminentemente práctica de las necesidades que tiene la empresa para internacionalizar su mercado. Internet ha conseguido que la globalización del mercado sea un hecho cada vez más necesario.
A nivel empresarial ha supuesto una oportunidad no solo para las grandes multinacionales, sino también para las organizaciones que, contando con los profesionales adecuados, aspiren a acceder a mercados internacionales a corto plazo.
En tiempos de incertidumbre podemos extraer buenos momentos para nosotros mismos. Este 2020 estudiar un MBA ha sido una de las opciones más elegidas para aquellos que han querido continuar su formación.
Vivimos tiempos complicados, la pandemia del coronavirus ha provocado que mucho países del mundo se hayan detenido por completo a nivel social, económico y laboral. Los confinamientos, las medidas restrictivas, han sido cambios radicales en nuestras vidas, con los que se espera poder detener la propagación de una enfermedad que ha puesto a medio mundo en jaque. Estas nuevas circunstancias excepcionales han demostrado que hay que prepararse siempre para cualquier escenario.
El aprendizaje que podemos extraer en estos momentos de incertidumbre es que debemos estar preparado para todo, y no solo hay que tener esto en cuenta desde el punto de vista de la supervivencia, sino del ámbito profesional. Muchos empresarios se están enfrentando a una época realmente dura por estar parada en seco la actividad de su negocio, por ello, contar con la formación adecuada para superar este tipo de crisis es fundamental.
Es evidente que todo problema presenta una oportunidad, para cualquier profesional que trabaje por cuenta ajena, un motivo trascendental para optar por la formación puede ser mantener su puesto de trabajo, añadiendo más valor a sus tareas o asegurar un impulso en su carrera profesional. Una formación de calidad, que mejore cualitativamente la posición profesional, y como consecuencia que mejore su situación económica, se puede conseguir al estudiar un MBA.
Plantearse la idea de estudiar un MBA durante este curso o para el próximo, es una buena idea, si tomamos como referencia tanto a los responsables de contratación de importantes empresas como a los coaching profesionales. Los postgrados que se ofrecen se caracterizan para empezar, por ofrecer una enseñanza flexible, contando con horarios intensivos para poder compaginar los estudios con otras actividades personales y profesionales.
Los Máster en Dirección de Empresas, más conocidos como MBA, son pilares fundamentales en la formación de un profesional que realmente es capaz de llevar con éxito las riendas de un negocio. Además, puede ser la puerta de acceso para tener un empleado cualificado, pero también el camino necesario si realmente quieres liderar una empresa sin tropezar por el camino.
Especialízate con EUDE Business School
El Máster MBA en Administración y Dirección de Empresas de EUDE Business School, con una duración de 9 o 12 meses, dependiendo de la modalidad, tiene como objetivo principal prepararte como líder para ocupar puestos de mayor responsabilidad y conocer todos los ámbitos de la empresa desde una visión global y actualizada. Así mismo, obtendrás todos los conocimientos y habilidades necesarias para emprender y liderar tu propio proyecto.
El programa de MBA de EUDE permite conocer y comprender todas las áreas de gestión de la empresa con un enfoque global y desde la perspectiva de la dirección de empresas. Una formación pensada y confeccionada por directivos de las mejores compañías nacionales e internacionales y adaptada a tus necesidades, ponemos a tu disposición la opción de realizar tu MBA en las modalidades online, fulltime presencial o executive.
Para poder ejercer un Liderazgo real, en necesario enfrentar diferentes aspectos relacionados con la forma de integrar dicho liderazgo dentro de las Organizaciones. Uno de los aspectos a tener en cuenta es saber el nivel en el que estamos liderando. Para que podamos entender el contexto del que estamos hablando, debemos establecer tres niveles de dirección dentro del liderazgo:
El Líder hace lo que quiere o puede en función criterios propios no basados en la estructura organizacional o procesos de la misma. Este liderazgo es el que en muchas ocasiones se considera autoritario, y se asocia a un líder no consultivo.
El Líder lidera en base a criterios externos, normas, cultura y buen clima laboral. Este tipo de liderazgo, es lo que podría denominarse un liderazgo complaciente en el que el líder se acoge a normas y procedimientos, acomodando a los intereses del staff de mando.
Es aquel en el que el Líder rompe normas y procedimientos. Se muestra como un líder transgresor que va más allá de las normas y resultados provocando cambios en el ecosistema y en la organización.
Estos tres niveles nos dan la radiografía de tres tipos de liderazgo totalmente diferentes y diferenciados entre sí:
Digamos que el Líder de primer nivel, “hace y deshace lo que quiere”, no le importan las consecuencias negativas en la organización y el sistema y tiene una baja conciencia del impacto a largo plazo de sus decisiones.
El Líder de segundo nivel, “hace lo que los demás quieren que haga”, es un líder voluble e influenciable que no asume riesgos y no cuestiona procedimientos por lo que se limita a administrar en un estado de falso bienestar cultural.
El Líder de tercer nivel, “hace lo que es beneficioso para el avance”, es un líder que cuestiona procedimientos, protocolos y pautas de actuación. Un líder que no teme ser juzgado o criticado por la realización de acciones que rompen normas y viejos paradigmas dentro de la organización.
Es necesario entender que cada nivel de dirección y liderazgo es necesario en la medida en que sepamos combinarlos ya que ninguno de los tres por si sólo daría buenos resultados en la continuidad del tiempo. Saber balancear cada uno de los niveles y entrenar las competencias para poder desarrollarlos a su máximo potencial dotará a los cargos directivos de más capacidad de trabajo, menos estrés y más acción.
En la siguiente tabla, pasamos a definir algunas de las competencias que debería desarrollar cada nivel para poder ser aplicado de forma correcta.
En cualquiera de los tres niveles de Liderazgo, hay que tener en cuenta que el factor clave es la “autoestima” y “autoimagen” que profese el Líder para consigo.
Este factor es el que realmente va a determinar la capacidad de adaptarse a la hora de aplicar uno u otro nivel de acción ya que en los tres casos va a ser necesario que el Líder enfrente y se enfrente a situaciones y personas que pueden hacer que este tambalee en sus decisiones y acciones por lo que se denominaría “la soledad del mando”.
Este concepto es temido por mucho líderes en las organizaciones y es por ello que se vuelven complacientes en su gestión haciendo prevalecer las relaciones sociales por encima de los principios y valores de la propia organización. Por lo tanto es importante que todo líder dentro de una Organización o Sistema, entienda y comprenda la importancia de manejar estos niveles y las relaciones que se derivan de ellos ya que en los tres casos la forma de interacción entre los equipos de trabajo y los líderes va a variar de forma muy significativa.
En nuestros programas y planes de formación trabajamos estos conceptos y contenidos de tal forma que dotamos a nuestros alumnos de las herramientas necesarias para que aprendan a gestionar desde estos tres niveles, bajo principios y valores organizacionales ordenados en la consecución de los mejores resultados para la compañía.
Docente en Habilidades Directivas
www.desarrolloyliderazgo.com
Convertir los deseos personales en metas alcanzables y ahorrar es posible si se siguen los objetivos SMART.
El mes de diciembre, significa siempre el final de un año, es sin duda una época para para hacer balance y también para empezar a pensar en los planes del próximo año. Lo cierto es que, cuando se echa la vista atrás para analizar si las tareas propuestas han llegado a buen puerto, a menudo nos damos cuenta de que muchas de éstas no se han realizado. Para evitar esta situación y una posible frustración, podemos seguir al pie de la letra la estrategia de los objetivos SMART, una serie de pautas para que nos hará ser realistas con nuestros deseos financieros.
Para convertir los objetivos monetarios personales en metas alcanzables, una buena planificación es básica y fundamental. Para ello, los propósitos deben ser muy claros y deben trabajarse poco a poco y de manera constante, sin olvidar los momentos de reflexión. Desde EUDE Business School os traemos a continuación las características que deben tener los objetivos para que se cumplan a largo plazo.
Specific o específico
Cualquier plan financiero debe llevar implícitos unos objetivos específicos de ahorro. Lo importante no es marcar intenciones sino concretarlas. Pensar en ahorrar no es suficiente hay que llevarlo al terreno realista y que esté dentro de nuestras posibilidades.
Measurable o medible
Debemos ser capaces de medir el progreso, así podremos ir avanzando y saber si estamos encaminándonos a la dirección correcta, saber si los resultados que estamos obteniendo son positivos.
Attainable o alcanzable
Esto significa establecer objetivos muy realistas en consonancia con la situación personal. Debemos poner objetivos que vayamos a ser capaces de conseguir, no tiene ningún sentido forzar el ahorro y estar incomodos porque entonces abandonaremos y no lo intentaremos.
Relevant o relevante
Debido a la pandemia por el coronavirus, nuestros hogares se convirtieron en oficinas, en un nuevo espacio de teletrabajo. Así, el comedor o el dormitorio se transformaron en el área de labores. Pero existen elementos claves para conseguir un lugar cómodo, agradable y adaptado al trabajo. En este post hablaremos de algunos trucos para conseguir crear un espacio de teletrabajo ideal.
La situación actual mundial provocada por el Covid-19 nos ha obligado a modificar nuestras costumbres y adaptarnos a distintas modalidades de trabajo, estudio y entretenimiento. Muchas empresas, en pro de continuar su actividad y paliar los efectos de la crisis, han solicitado a sus empleados trabajar desde casa.
Ante todo, elige bien el sitio en el que vas a instalarte. Piensa que será donde trabajarás habitualmente, por lo que debes tener en cuenta que sea un espacio con poco ruido y sin distracciones. Además, tiene que ser lo más cómodo y funcional posible. Algunos artículos que serán claves para lograr un espacio de trabajo funcional son: ordenadores y dispositivos con buena conexión a Internet, una silla ergonómica que se adapte al cuerpo y que se pueda regular, una mesa ampliada y espaciosa que pueda albergar los equipos y accesorios necesarios para el teletrabajo.
Una buena iluminación evita que hagas grandes esfuerzos con la vista para poder leer, por lo que es recomendable que trabajes con luz natural o que incorpora al espacio de trabajo a buena fuente de luz artificial. Cuando hablamos de un espacio tranquilo nos referimos a un lugar de la casa que esté lo más alejado posible de ruidos y distracciones, como televisión, cocina…
Para amenizar las jornadas laborales, podemos incluir algunos detalles que le impriman personalidad a nuestro espacio de teletrabajo. Una planta, un poster, frases motivadoras y fotografías, son algunas ideas. El objetivo es que la persona se sienta lo más a gusto posible.
En definitiva, se trata de combinar creatividad y buen gusto, el objetivo es conseguir que es el espacio de teletrabajo sea un lugar agradable y ameno. La salud, el confort y la productividad, dependerán de cómo diseñemos este puesto de teletrabajo.
Desde EUDE Business School sabemos la importancia de adaptase a las demandas del mercado y saber dirigir y gestionar equipos de trabajo ante nuevas situaciones. Por ello, con nuestro Máster en Recursos Humanos, Dirección y Gestión de Personas los alumnos serán capaces de contar con las herramientas necesarias para liderar con éxito la estrategia de recursos humanos en cualquier empresa.